XIV Aniversario - Utiel-Requena 2023

 

Utiel-Requena

Septiembre del 2023, ya han pasado 14 años desde que nacimos como grupo aficionado a la genealogía, y tras estos años nos hemos convertido en un grupo de personas que tenemos el trato de familia, a la que falta alguno, enseguida lo notamos y preguntamos. Este año ha pasado y me han sorprendido mucho.

El viernes, una vez que lo tenia todo preparado, cargamos el coche e iniciamos el viaje. Hacia muy buen tiempo, un cielo azul raso, sin una nube, con una temperatura muy agradable. El preludio de un fantástico fin de semana. Este viaje ha sido relativamente tranquilo, en ningún momento he oído a Rafa quejarse de la velocidad, ni del tráfico ni de sus rezos, ya rezó bastante el fin de anterior.
Cuando ya estábamos llegando le comento: Rafa, como este año seremos los primeros……. Frase que me interrumpe para preguntarme el porqué.

A lo que yo le respondí con cierta alegría…Si, hombre, Abelardo me dijo que Maria iba por la mañana a peluquería y Jaume me comento que como ellos llegaban el día anterior, irían por la mañana a ver las bodegas Pago de Tharsys. Asi que este año seremos los primeros en llegar y podre estar preparada para hacerles fotos a sus llegadas.

Por fin llegamos al hotel y aparco, miro el reloj y veo que son las 12h del mediodía, buena hora. Nos bajamos del coche y nos dirigimos a la puerta del hotel cuando me encuentro saliendo por la puerta a Abelardo, Jaume y compañía. ¡!!!!No puede ser!!!!!!! miro el pelo de Maria y esta perfecto. La alegría de reencontramos con los amigos me hacen olvidar que, de nuevo, ellos me han ganado. Ellos se van a la bodega que querían visitar y nosotros con Pepe nos vamos a registrarnos y a esperar a los amigos. Ya van llegando, Ana desde Alicante, Cristina desde Albacete, Jose Vicente al igual que Jaume desde Barcelona, André desde Francia y también doy la bienvenida a Pascual y Juan Carlos, este año se han animado a venir y disfrutar de nuestra mutua compañía, y como siempre llegan abrazos de todas partes, empezamos a llenar la cafetería y el hall del hotel.

A las 14:00 h nos subimos a los coches para dirigirnos al “Mesón del vino” el restaurante que nos espera para comer. Al llegar veo a Eric, ¡!!bien!!!, este año ha llegado el primero y me lo hace notar, el año pasado llego corriendo y sudando. La verdad es que en esta zona vemos que las personas son muy amables, una señora ha traído en coche a Eric desde la estación, sin conocerlo se ha ofrecido.

La mesa es grande, alargada y como las únicas mesas que llevan identificador, cada uno se sienta al lado de quien quiere.

La comida esta todo muy bueno y como dice Rafael, la tripa ya nos está estirando…La camarera es super simpática, se ofrece a hacernos fotos y cuando nos levantamos para irnos no veo a Jaume y a Carme, ¿Dónde estarán?   Tengo que encontrarlos, Rafael y yo hemos venido con ellos en el coche. Y al final a aparecen, habían estado con la camarera haciéndose fotos, increíble, asi es nuestro Jaume.

La mesa es grande, alargada y como las únicas mesas que llevan identificador, cada uno se sienta al lado de quien quiere.

La comida esta todo muy bueno y como dice Rafael, la tripa ya nos está estirando…La camarera es super simpática, se ofrece a hacernos fotos y cuando nos levantamos para irnos no veo a Jaume y a Carme, ¿Dónde estarán?   Tengo que encontrarlos, Rafael y yo hemos venido con ellos en el coche. Y al final a aparecen, habían estado con la camarera haciéndose fotos, increíble, asi es nuestro Jaume.
Al termino nos dirigimos al hotel para algunos descansar, otros se van de paseo para hacer la digestión, yo me voy con mi Pepe para preparar los regalos, tenemos que montar las cajitas para el panal de miel, no es que sean complicadas, pero me doy cuenta de que Pepe lo hace mejor que yo, asi que como una cadena de producción trabajamos en silencio codo con codo. Yo veo a Pepe muy alicaído y le pregunto.

Pepe, ¿estas bien? ¿Estas como con sueño, quieres un café o algo fresco?

Pepe me cuenta que se ha apuntado a un gimnasio con su hijo y como su hijo no va, pues Pepe, hace los ratos del hijo. Esta semana ha estado tres dias y no se cuantas horas…… Esta reventado, molido. Al término del trabajo, nos vamos a tomar un algo a la cafetería y después a descansar un poco. Al llegar a la habitación abrir la ventana y me senté a leer un rato un libro y ¡!!Que placer!!, solo se oían un montón de gorriones que había en un gran árbol.

Al poco rato bajamos para esperar a los que iban llegando para unirse a nosotros y tomándonos un refrigerio se iban mezclando conversaciones y los abrazos.
Ya ha llegado Antulio y Chris, enseguida veo a Rosa y por fin oigo a Jerónimo con Leonor, vienen de consultar los archivos del Burgo de Osma y como no podía ser de otra manera, en el viaje a Utiel han hecho turismo por esas tierras castellanas. Después del refrigerio nos vamos a cenar.

De nuevo la mesa es alargada y cada uno se sienta según su elección.

El comedor es distinto al que comeremos al día siguiente, pero algunos ya han visto como están dispuestas las mesas con los regalos y les ha gustado, me dicen ¡Qué bonito!, creo que es por los lazos. Mañana lo disfrutaremos.

Empiezan a servir los platos y yo que tengo a Jaume enfrente no puedo parar de reírme. Es un payaso y eso que ha venido sin voz. Se nos acaba el vino y va cogiendo las botellas de los compañeros.
Yo le digo. - Jaume pide más vino a la camarera….

Y Jaume muy serio me dice. - Mamen asi es más divertido.

Traen la ensalada y teníamos en la mesa un bol con los aliños.

Veo que Jaume coge dos unidades de aceite y le dice a Carmen, su mujer. Guarda eso en el bolso, que el aceite va muy caro.

No me lo puedo creer, le decimos. - Pero Jaume, por Dios…. y su mujer no le hace caso. Y entonces se lo dice a Maria. - Maria, a ver como es tu bolso……Vale, venga guarda todo ese aceite que es muy caro y ahora me voy tres dias a tu casa y a lo mejor no me pones aceite……. Ahí ya las carcajadas eran espectaculares.

Os imagináis a Jaume diciendo eso sin voz, explicándose con señas y mimos…Todo un poema.

Cuando nos levantamos para irnos, me fijé y vi las unidades de aceite en la mesa. Una broma de Jaume.

Jaume, para su garganta había estado todo en día siguiendo los consejos de los amigos, miel, limón, coñac, ron……de momento recuperaba su preciada voz, pero al poco, la había perdido. Esos remedios son para guardar la voz, no para seguir hablando.

Y asi transcurrió toda la cena, entre risas, emociones y con esas sensaciones nos despedimos y nos retiramos a nuestras habitaciones.

A la mañana siguiente nos encontramos desayunando y se reanudan las conversaciones.

Quedamos que a las 10.30h sale el autocar.

Yo le anuncio a Rafael que yo no iré a las bodegas, mi lesión de rodilla me impide subir al autocar y estar mucho rato de pie, asi que yo me quedare en el hotel, esperando a los que llegaran para comer.
Van bajando todos y de repente pregunto yo, ¿Y el autobús donde parará? Este hotel tiene tres puertas de acceso, asi que algún socio se pone a los tres accesos hasta que vemos al autocar llegar.

Se van subiendo y yo le digo a Rafael, cuenta a los tiene que ir (no me acuerdo el numero) los demás van directamente con sus coches. Y Rafael los cuenta y me dice, un numero menos. No puede ser, vuelve a contar y el mismo número. Y yo le pregunto, Rafa, ¿te has contado tu? - Dios, no se había contado -. Asi que ya están todos.

A todo esto, me llama Javier que había ido a llevar a su hija al aeropuerto y al final llegaban a tiempo de unirse a las bodegas. Aviso a Rafael, van Javier y familia.

Cuando se van todos, yo subo a la habitación para guardar las cosas, dejo la maleta en consigna y me siento en una mesa en el jardín del hotel con mi libro, al pie del árbol donde de nuevo oigo a los gorriones. ¿Puede haber mayor placer???? Me siento como en casa. Mas o menos una hora después llega un señor a darle de comer a los pajarillos y dos amigos suyos hablando a voces desde la distancia. Se acabo la lectura.

Luego llega Nuria, y enseguida nos ponemos a hablar y no se como terminamos intentado organizar el aniversario que viene, je,je,je. Con Nuria es como hablar con una agencia de viajes, lo sabe todo.
Antes de salir de las bodegas me llama Rafael para decirme que le falta uno, no sabe quiénes…. y de repente, llega Annie. Me confirma que ya están todos en el autocar y no se deja a nadie atrás. Ahora el autocar no puede salir, hay dos coches que le molestan, hay una boda y han aparcado mal, el conductor raudo y veloz avisa y enseguida soluciona el problema.

Ya empiezan a llegar los socios, el primero en ver es a Hervé, ha venido por primera vez con su mujer y sus padres. Su padre Louis bromea que si esta en España, se llama Luis. El año que viene, su tarjeta estará como Luis. Para mi será un honor.

Cuando veo a Rafael me confirma que he hecho muy bien en no ir, era subir y bajar escaleras y estar todo el rato de pie.

También abrazo con cariño a Antonio y a Javier que me presenta a su hija.

Luego Rafael me cuenta lo que han visto en la bodega.

Hay unas tinajas selladas y esas son de una comunidad judía y solo el rabino puede tratar ese vino. Asi que cuando llega el rabino, le explican lo que tiene que hacer y lo hace él mismo, tras lo cual, vuelven a sellar las tinajas.

Y ahora os regalo con el relato de la visita a la bodega vista con los ojos de Jaume.

Justamente a las 10,30 de la mañana, aparecía el autocar que debiera llevarnos a las Bodegas Dominio de la Vega. Mamen desde lo alto de la escalinata del Hotel, recontaba con la vista a los presentes, haciendo una marca en un listado sujetado por su mano izquierda. Una vez acomodados en nuestros asientos, el bus inició su marcha. Tomó un tramo de la autovía para después incorporarse a la carretera de San Antonio a Utiel, para después de unos kilómetros hacer un giro en una rotonda y adentrarnos en el camino despejado de las Bodegas.

Durante el recorrido, comentábamos que afortunadamente las lluvias de los pasados días no habían afectado la viña cercana y las primeras fotos de esa jornada dejaban constancia.

Una vez llegados a la Bodega, los participantes buscaban los hilos dorados de sol que se abrían paso entre las ramas, calentado ligeramente nuestros rostros.

Algunos de los miembros eran ya conocedores de los secretos en la elaboración de los vinos y cavas, otros no, y estos últimos en unos minutos descubrirían el proceso milenario.

El guía que nos acompañaría durante todo el recorrido hizo su presencia, tras presentarse, nos indicó que siguiéramos sus pasos, estos nos llevarían a un espacio abierto entre los árboles. Una mesa recogía unos platos con embutidos y una especie de empanada, insertada de butifarra. Nuestros ojos, no obstante, se dirigieron a un envase que contenían unas botellas de vino blanco a unos ocho grados de temperatura.

Las explicaciones y comentarios giraron en esos primeros minutos en que consiste la elaboración, esta gira, en la fermentación del zumo de la uva.

Estábamos justamente en el momento de la vendimia, entre los meses de septiembre y octubre, para celebrarlo, una ayudante de nuestro guía iba llenando las copas extendidas sobre el tablero, lo hacía con la elegancia de aquel que está acostumbrado a tratar con vinos, de forma delicada.

Seguían los comentarios, hacían referencia a la antigüedad de la finca, de los diferentes propietarios, se giró señalando el edificio, su estructura, formas, medidas, momento que la mayoría de los socios allí reunidos, aprovechamos para tomar nuestras copas, que quizás por respeto o timidez no lo habíamos hecho antes.

Dejamos atrás ese espacio y nos introducimos en las bodegas, los jerséis eran necesarios, el cambio de temperatura no era aconsejable sobre todo para aquellos en que la palabra adquiere la grandeza de la comunicación.

Por tanto, decidimos callarnos y en las diferentes estancias, saborear vinos, dejarnos llevar por sensaciones reconociendo en los vinos genealógicamente a nuestros abuelos, cuando se descalzaban para pisar la uva.

El vino y el cava es un proceso que se inicia en la vendimia, el despalillado, estrujado, maceración, fermentación, prensado, crianza…

Particularmente, me interesan los cavas, ellos me retraen a la infancia, cuando abrir una botella en diferentes fiestas se convertían en un acontecimiento familiar, eran los años felices de nuestra juventud, disponíamos de padres y todo el tiempo del mundo para llevar nuestras aspiraciones a buen puerto, pero en fin no nos pongamos melancólicos, porque acabamos de entrar en la sala de las burbujas, en la fábrica del goce, deleite, placer y jubilo.

Nuestro guía se había convertido a esta altura de nuestra visita, en compañero y amigo, era evidente que los vapores alcohólicos estaban provocando una cierta euforia que deberíamos, sería conveniente, controlar.

En ese proceso casi final, en el removido, las botellas de cava eran trasladas a unas jaulas que cambiaban el giro de las botellas de forma automática y por medio de un programa. El enturbiado de las botellas pasaban desde una posición horizontal o rima a una vertical o también llamada punta. Así, el enturbiado se colocará en el extremo del cuello de la botella, momento del degüelle. Es un momento triste y alegre al tiempo, es el paso de la infancia, adolescencia, juventud al de la madurez. Tras 18, 22 o 24 meses llega el momento de la circuncisión, el degüelle.

Se toma la botella, conduciéndola en la misma inclinación hacia una bandeja en que se congela el cuello a 22º grados bajo cero. Salta la chapa provisional, con una cierta explosión debida a los 6 bares de presión que contiene la botella y el sollozo del recién nacido, es acompañado de unas lágrimas perdidas y reemplazadas por vino blanco con azúcar de expedición en mayor o menor cantidad sea un semiseco, brut o nature.

En el regreso y cuando ya estamos sentados de nuevo en el autocar, pienso en la genética de las cosas y como estamos predestinados desde nuestra creación a tener un destino, en las mesas más modestas o por el contrario, en las más soberbias.

Llegados al hotel y ya sentados en la mesa del comedor, obtuve la respuesta, en la más modesta. Por Jaume Girbés

Nos sentamos en los jardines del hotel y allí tomamos un aperitivo, antes de entrar al comedor. Las bromas, risas, preguntas, respuestas no paran.

Ya por fin nos vamos al comedor y allí están dispuestos delante de los platos en nombre de la persona y detrás esta dibujado lo que ha pedido de comer. Eso lo hago todos los años y asi no hay interrupciones de conversaciones, los camareros saben lo que ha pedido esa persona. También tiene los regalos.

Para los hombres una botella de vino “Ceremonia bobal”, la JD ha elegido este vino de las bodegas Vicente Gandía https://vicentegandia.es/ por ser de una uva autóctona la “Bobal”. Y para las mujeres se ha presentado un trozo de panal de abeja, nos pareció un regalo original y que por supuesto es de las abejas autóctonas. “Sierramiel” en los Corrales de Utiel, pequeña aldea de unos 300 habitantes, a 5 km. de Utiel. Podéis leer la historia de estos hermanos.

https://mielsierraflor.es/content/4-sobre-nosotros

Empiezan a servirnos las viandas y mientras tantos todos conversamos con todos.

Yo en concreto tengo a mi lado a Juan Carlos y a mi derecha a Antonio y enfrente…… a que no adivináis a quien- Si, -Jaume- Y evidentemente, como no podía ser de otra manera, es el protagonista de la mesa. Él ya lo ha reconocido, es un apasionado del cava y la verdad es que sabe mucho. Nos da, lo que casi podríamos llamar, una disertación de la sensación de degustar un buen cava. La próxima vez lo grabare, vale la pena verlo y oírlo. Yo os aseguro que antes no me gustaba el cava y ahora si lo bebo en ocasiones especiales.
Después de comer y reconocer que estaba todo muy bueno, toma la palabra.

Quiero ser breve, muy breve, no recuerdo si agradecí a los presentes su asistencia, pero en todo caso, ya lo había hecho personalmente a cada uno de ellos.

Les anuncio que definitivamente hemos terminado de fotografiar y que, por fin, este año la Asociación cambia definitivamente a seguir con el proyecto que iniciamos el año pasado” potenciar las indexaciones”. Todos con sus miradas y sus gestos muestran su apoyo a la JD.

Como siempre he dicho “uno para todos y todos para uno”

Antes de llegar a casa ya me hacen preguntas sobre el “mig any”. Aunque sea en plan sencillo, un fin de semana hermanado.

Y mi propuesta es el Grau Gandía para primeros de marzo.
¿Que os parece?

Jerónimo Lloret Sellés
Buenas tardes, Grau de Gandia para Marzo perfecto, no estaría mal un fin de semana de hermanamiento tranquilito. Saludos.
Día 2023-10-11