X Aniversario - Segorbe  

Este año quería que fuera especial, que todos lo recordáramos como el X aniversario y que echando la vista atrás, sintiéramos orgullo del tiempo que llevamos juntos, compartiendo experiencias, alegrías y apoyándonos en las tristezas. Como una gran familia. Todos bajo un mismo paraguas que es el espíritu de nuestra asociación.

Bien, no solo lo hemos conseguido, nos hemos superado y con creces.

Yo desde mi humilde posición, voy a intentar explicaros todo con todo detalle, y se me ha ocurrido que al menos para esta ocasión podría añadir una parte interactiva, para que todos los que queráis, podáis añadir vuestra opinión y experiencia, ó mejor dicho su sentimiento, pues ayer estuvo plagado de sentimientos.

Bueno y porque no, también os voy a explicar cómo me fue este año en la preparación del aniversario, que por primera vez creía que no saldría nada bien.

Se acerca la fecha que yo publiqué el día del aniversario, y claro está, debe estar listo más o menos el programa, lugar, fecha etc.…

A mí me pilla estando en Elche, en la Basílica, fotografiando esas montañas de libros y cajas. Yo quería hacerlo en Segorbe, pero todavía no había firmado el convenio con la Diócesis de Segorbe-Castellón, y mi buena idea dependía de David, al cual todavía no conocía bien.

Ya por fin el día 5 de diciembre, recién llegada de Elche, me voy al obispado a firmar el convenio y aprovecho para contarle a David mi propuesta. Me dice que si, sin problema, genial, David me enviara el programa y concretaremos los horarios.

Nos vamos a Segorbe, como siempre acompañada de Rafael, mi “fiel escudero”. Nos tendríais que ver por la calle. Yo como siempre con prisas y un pasito por delante y hablando, muchas veces me quedo hablando sola, y Rafael tan tranquilo. Me siento tonta, por mucho que yo acelere el paso, no llegare antes, no sin mi Rafa. La vedad es que somos un poema, Rafa tiene las patas largas y da sus pasos y yo con mis patitas tengo que dar más pasos que él y al final me acelero. Pues como se nos meta gente entre los dos, acabo preguntando a la señora de detrás mío, ¿a que sí?, le había contado toda la historia a esa señora. Pobrecita, debe pensar que estoy loca hablando sola. A ver quién le explica a esta señora que yo le hablaba a mi Rafa y ella se había puesto en medio….
Ya había hablado con el hotel y yo lo tenía claro.

Empezamos a buscar un bar muy cercano a la Catedral para el “tentempié de media mañana” y solo veo uno, su apariencia no es lo mejor del mundo, un pequeño bar. Pero bueno como es para tomar un café, ya va bien y al entrar veo que solo hay un chino en la barra, intento hablar con él y no nos entendemos, diálogo de besugos ó chinos, él muy sonriente me dice a todo que sí y yo le pregunto, ¿que sí que?¿que si tienes sitio para unos 60/70 o que si está abierto o que si será barato? un parroquiano del bar nos ayuda y quedamos de acuerdo. Me da su teléfono, se llama Yong(el chino, no el parroquiano).

El siguiente paso es buscar donde puedo comprar un regalito para los socios. No hay nada en Km a la redonda, nada que me guste, que sea típico de Segorbe, un recuerdo. En una tienda, una chica me dice que no me preocupe, que ella me lo mirara y lo gestionara. Se queda con mi tarjeta.

Y nos vamos al hotel a concretar el menú y saber el precio. Otra piedra en el camino. No podrá ser, no lo han mirado, están muy ocupados pues son vísperas de las comidas de Navidad de las empresas.

Y algunos socios van preguntado y empujando. Eso me llena a ilusión, todo saldrá bien.

El final fue:

El menú me lo enviaron con 10 días de retraso.

 

La chica que se iba a encargar del regalo, tras varias llamadas mías, el día 5 de febrero ya lo damos por imposible. ¿Y mis chicos se van a quedar sin regalo? NO, ¡¡¡¡¡¡¡se me enciende la bombilla!!!!!!! y le digo a  Rafa, se me ha ocurrido una idea, voy a llamar a Meli y le pregunto si me puede hacer algo.- Mamen eso no puede ser me asegura Rafael, ¡como Meli de Sagunto te va hacer y en tan poco tiempo algo de Segorbe!. Hombre de poca fe.

Me responde enseguida con esa alegría suya y le propongo mi idea. Habla con sus artesanos y al disponer de tan poco tiempo, me propone hacer un “socarrat”. En menos de 15 días me hicieron 70, uno a uno y pintado a mano. Gracias Meli, me salvaste. Hice muy bien al cálculo, lo clavé.

Yong (el chino del bar) no responde y tuve con prisas que buscar otro bar la misma tarde del viernes.

Y por fin, ya tengo el programa del concierto y por supuesto ya lo puedo poner en la web y recibo el ofrecimiento de Pablo para hacerlo él. Genial, todo tuyo. ¿A que este año era muy bonito?, Pablo es un artista.

Enseguida empiezan a llegar inscripciones y me ilusiono, son gente nueva, gente que lleva poco tiempo con nosotros y vienen para conocernos, otros que no habían tenido oportunidad hasta ahora. Así que preveo que este año seremos más.

Estando así las cosas, ya ha empezado a sonar el despertador por las mañanas con esa famosa música del “Quinto levanta”. - Rafa, arriba que nos vamos a digitalizar……
Entre parroquia y parroquia yo sigo con mis cosas, además de todo, tengo que preparar los identificadores, la distribución de las mesas etc…. Este año selecciono a uno de cada mesa para ser el representante de la asociación, Solo estamos Rafael, Felipe, Javier y yo. Así pues, elijo a André, Inma, Pepe, Ricardo e Ignacio. Son 9 mesas.

Llega el viernes y después de ir a la peluquería, en casa preparando las cosas, empiezan a llegar mensajes a mi ordenador y a mi móvil que los amigos ya están llegando a Segorbe. - S.O.S y yo aquí. Una vez más. - Rafa corre!!!!!, y Rafa simula que corre. Pero aquí mando yo, yo conduzco.

 Ya por fin llegamos a Segorbe son las 17.00 h y nos registramos, inmediatamente, entrego en la recepción la distribución de las mesas, que previamente había confeccionado teniendo en cuenta la afinidad entre las personas, y los regalos que llevaba para los socios.

Empezamos a encontrarnos con los amigos, vemos a Estella y a Carlos llegados desde Buenos Aires. Decidimos quedar en una glorieta del botánico para tomar algo todos juntos y le pido a las recepcionistas de los hoteles que avisen a mi gente de que nos vemos a las 6 de la tarde en esa glorieta. Nos sentamos en la terraza, pero ya está anocheciendo y el fresco se nota, así que al terminar nuestras bebidas nos vamos a un salón del hotel y allí seguimos con nuestra charla. La siguiente parada sería en el restaurante “La Senda de la Brasa”, donde hemos quedado para cenar y allí vemos a los demás amigos, somo 30.

Nos repartimos en ese salón que nos han reservado para nosotros y ya empiezan las conversaciones y recordamos sesiones anteriores. En nuestras caras se ve felicidad y empieza a verse ese cansancio de final de semana y Km recorridos. Pedro está en la misma mesa y me doy cuenta de su cansancio, me dice que tiene la habitación en el Seminario y estaba pensando en marcharse, pero le daba como un poco de pereza irse solo, después de aquella cena llena de emociones y amigos…. y yo le digo, ¡espera que busco a ver quién duerme en el Seminario!, y no se me ocurre otra idea de decirles que Pedro tiene miedo a esos pasillos…. Je,je,je, mis ideas de bombero.  Entre risas, Pedro se va con Nuria y los Celiberti.

Hemos comido de maravilla y nos han atendido muy bien.

Los demás vamos saliendo del restaurante y después del parque del botánico nos separamos, cada uno toma el camino a su hotel.

Dormimos muy bien, de lujo y al salir del hotel en la recepción me encontré con Carmen de Alicante. La primera que veía del nuevo grupo.

Ya en la puerta de la Catedral me encuentro con David y Gemma y los primeros amigos que van llegando. Entramos en la Catedral y nos encontramos con la primera sorpresa, Gemma, os aseguro que los demás asistentes os lo pueden confirmar, nunca he visto una persona que explique la historia como si fuera un cuento, es genial, como nos presentó lo que tiene en ese maravilloso museo, que es el segundo en importancia de la comunidad valenciana, la explicación de los retablos, hasta los niños tomaron interés por las palabras de Gemma. Y hasta aquí os contare del museo, quiero que vayáis a verlo, quiero que os dejéis embargar por esa voz de Gemma. Y desde aquí os convoco, cuando estemos Rafael y yo digitalizando en Segorbe, será una muy buena oportunidad para volver a revivir lo que ayer sentimos unos pocos. En un momento dado de la visita y embrujados por las palabras de Gemma, vi a David que se incorporaba al grupo acompañado de una persona y que, por la reacción de Gemma pensé, es el Deán, y efectivamente, nos fue presentado como D. Federico Caudé, Dean de la Catedral de Segorbe. A todos nos gustó su gesto de darnos la bienvenida a Segorbe y nos entusiasmó, más si cabe, su discurso cercano y muy apropiado a nuestras raíces. Gracias D. Federico.

Tras la visita, nos despedimos de Gemma, que ya tiene su club de admiradores, y nos vamos a una terraza de un bar a tomar el sol, estamos helados, unos más que otros, ¡Que frio hace en la Catedral con esos muros de piedra!. Se llenó la terraza. Allí ya sabía que éramos uno más a comer y poco después me enteré de que éramos dos más. Llamé al restaurante para anunciarle que por favor pusiera tres cubiertos más. Ya éramos 69, no sería la última sorpresa.

Uf!!! Ya son las 11.50 h y había quedado con David a las 12 para el concierto. Levanto al grupo y nos dirigimos a la Catedral, subo las escaleras y me pongo enfrente de David y en ese momento las campanas marcan las 12.00 h. David dice, ¡Mamen esto es puntualidad!. Le muestro mi reloj y respondo, es que además funciona. Je,je,je

Empieza el concierto y que bien suena ese órgano, claro ha sido restaurado hace poco. Santiago Diaz Santamaria al frente de ese teclado nos deleitó con un programa donde hay varias piezas de su creación, es compositor, un maestro con mayúsculas. Venia acompañado de Inma Muñoz, la soprano y David Montolio el tenor. En algunas piezas es David quien canta y en otras es Inma. La emoción va “in crescendo”os lo aseguro. Y llega la última pieza, la que David me prometió, el Ave María, y para sorpresa de todos, incluso mía, está interpretada por los tres. Qué maravilla, estábamos todos tocando el cielo. Todo acompaña, el templo dedicado a María, madre de Jesús, nuestra madre, a la segunda nota ya noto ese picor en la garganta, y cuando se juntan esas dos voces… ya me rompo, se me caen las lágrimas de emoción. Al termino todos nos levantamos para aplaudir y veo que David me lanza un beso. Gracias campeón, me atrapaste, me sorprendiste y nos enamorasteis, si, todos salieron enamorados de lo que Santiago, Inma y tú nos hicisteis sentir.

Después David nos invitó a seguirlo hasta la sacristía para mostrarnos “la Verónica” que hace poco un hijo del pueblo le había entregado. Esa pieza, un relieve que estaba en la puerta de la Verónica en los muros de la Catedral, había desaparecido hace 80 años.

Dando un paseo nos dirigimos al hotel.

Confirmo con el restaurante que están preparados los tres cubiertos que faltaban y en ese momento llega otro, un cubierto más, Gabriel el nieto de Felipe, una preciosidad que yo no había visto hasta ese momento. No hay problema, ya somos 70.

Empezaron a servir la bebida y las conversaciones estaban en todo su esplendor. Yo ya no sabia a donde acudir, si a los compañeros de mi mesa, a darme como siempre, una vuelta por las mesas…. Bueno pues entre plato y plato voy haciendo.

En los cafés me levante para, como es costumbre, dirigir unas palabras a los amigos y era tan grande el espacio y tan poquita cosa que soy yo, que no se me oía. Se me acerco José Manuel Gironés de UNESCO-Valencia y tomándome del brazo me dice. ¿Mamen, me permites a mí? Yo no necesito micrófono. Por supuesto, todo tuyo.

José Manuel nos explico un par de proyectos que tienen entre manos y nos invita a participar, nos habla de que ha estado conversando largo y tendido con Emilio Alba, vicesecretario de la Academia Valenciana de Genealogía y Heráldica, y los acuerdos de mutua colaboración que habían llegado. José Manuel nos presentó un precioso libro de “la Crónica de Ramon Muntaner” gran obra en la que José Manuel tiene una participación en los textos, imágenes, mapas y cuadros sinópticos. Y leyó un texto que había de su puño y letra, una dedicatoria para Rafael y para mí. Esta dedicatoria iba acompañada de la firma de todos los asistentes. Gracias a UNESCO-Valencia y a todos los amigos.

Ya por fin me toca el turno de agradecer a los asistentes que un año más hayan elegido estar con nosotros, para celebrar el X aniversario de esta nuestra asociación. Aprovecho la ocasión para presentarles oficialmente a quien desde hace un mes y medio es mi jefe, de Patrimonio del Obispado de Segorbe-Castellón y creo que mi amigo, percibo mucha complicidad entre los dos, David Montolio. Les recuerdo que el martes Rafael y yo empezamos una parroquia importante, aunque no tenga documentación sacramental, si hay mucha documentación y tenemos por lo menos para un mes, Burriana. Me siento y recuerdo una conversación que he mantenido con David.

Ah!!! Se me olvidaba, esto es para Rafael. - Me han invitado a que después vayamos a Teruel-Albarracín. Vicente M. que esta muy atento me dice, Mamen le he leído en los labios “no jod..”, bueno, no hay problema, siempre me sigue, lo dice para hacerse de rogar…. Je,je,je, así es Rafael.

Os aseguro que si el cuerpo aguanta y la salud nos acompaña iremos a Tortosa, Teruel-Albarracín y donde Dios nos lleve.

Poco después van llegando las despedidas, no me gusta decir adiós, pero lo entiendo, tienen que volver a casa y han hecho muchos Km. Ya está cayendo el día y nadie quiere la noche en la carretera.

Nos quedamos un grupo, 9 personas. Es muy agradable estos momentos de más intimidad, nos dejamos llevar entre los recuerdos de otros años, otras conversaciones. Y como todos los años, me acuerdo de mi amigo, nos dejó hace un tiempo y él nunca se perdía un aniversario. Disculpad este recuerdo, pero se que Fernando hubiera estado muy orgulloso de hasta donde hemos llegado.

Ya llega la hora de la partida, se queda el grupo de 7 socios que pernoctaran en Segorbe.

El año que viene otro aniversario y que ya me han preguntado donde será. No lo sé.

Así que, con todo mi cariño, me despido de vosotros hasta el año que viene.

Los asistentes