Mi pequeña historia.- de Roselyne

Hola

Esta es mi pequeña historia.

Todos mis antepasados son españoles. Algunos se fueron en Argelia.

Mi abuela materna nació en Argelia como su madre, su padre José Antonio Gongora Rodríguez nació en Benahadux (Provincia de Almería).

Ellos se casaron y tuvieron dos hijos.

Mi bisabuelo vivió unos años en Argelia pero enfermo y no se quería morir en tierra lejana. Decidió volver a España.En esa época mi abuela era un niña pequeña, cuando un día su padre la llamo y le dijo: “hija, adiós me vuelvo a España”. En esa época de guerra era difícil obtener informaciones, mi abuela nunca pudo saber si su padre había conseguido llegar a su país.

Toda su vida nos hablo de su padre y en su salón tenía un gran retrato de él.

Escribimos al Obispado de Almería, a la iglesia de Benahadux, al registro civil...... no recibimos ninguna repuesta. Fuimos en España sin conseguir nada.

Nos enteramos que los cementerios de Benahadux habían sido destruidos durante la guerra civil, y muchos documentos habían desaparecido.

En 2005 con mi madre y mi hermana decidimos de volver a Almeria. Pasamos varios días buscando pero nadie nos podía ayudar. Un día una empleada del registro civil nos aconsejo de volver a Benahadux y de buscar allí. En Benahadux encontramos la iglesia cerrada, igual en el juzgado de paz. El registro civil nos dijeron que no tenían informaciones tan antiguas y además los empleados no eran naturales de Benahadux y no podían hacer nada. Sin embargo una persona nos propuesto de volver el día después por si acaso..... Nuestro viaje se acababa, el día siguiente ya nos teníamos que ir . Ese día volvimos al registro civil y una persona nos dijo que justo enfrente de la iglesia vivía una señora que quizás podría ayudarnos. La encontremos y le contamos toda nuestra historia. Se propuso ayudarnos, le dejemos todas las informaciones que teníamos. Al mismo tiempo una persona del registro civil nos dio el número de teléfono de la asistente del Juzgado de paz. Aunque era sábado la llamamos explicándole toda la historia y diciéndole que ese día era nuestro ultimo día en España. Nos dijo que iba a hacer una búsqueda y que nos tendría informadas. Tres semanas después recibimos la partida de defunción de Antonio Gongora Rodriguez, mi bisabuelo había conseguido volver a su tierra natal donde falleció unos años después.

Mi abuela nunca conoció el fin de la historia de su papa. Le dedico este escrito, esperando que donde se encuentre pueda conocer la paz.

Roselyne